sábado, 24 de noviembre de 2007

Algunos datos

  • El IPCC (Panel Intergubernamental para el Cambio Climático) dice que el planeta se calentará 5,8 grados en los próximos 100 años. Lo que no dice es que este es uno de los posibles escenarios de las docenas de posibilidades estudiadas.
  • En el IPCC es imposible encontrar datos que demuestren que el cambio climático producirá un aumento de los desastres naturales, ni una disminución de la producción de alimentos, ni desplazamientos humanos mayores de los que provoca hoy la hambruna o la guerra.
  • En el caso de que se cumpla el protocolo de Kyoto por la totalidad de los países firmantes, tan sólo se pospondría el calentamiento global en 6 años.
  • El cumplimiento del protocolo de Kyoto supondrá un gasto de entre 150.000 y 350.000 millones de dólares al año.
  • El coste que le supone a EEUU adaptarse a los recortes de emisión del CO2 plasmados en el protocolo de Kyoto sería suficiente para dotar de agua salubre a todos los ciudadanos del planeta.
  • Entre 1970 y 1999 en EEUU la emisión total de los seis elementos contaminantes más importantes descendió en un 31 por ciento mientras, los kilómetros recorridos por vehículo aumentaron en un 140 por ciento, el Producto Interior Bruto aumentó en un 147 por ciento y la población en un 33 por ciento.

domingo, 18 de noviembre de 2007

Sobre lo natural en la naturaleza.

Pongamos un supuesto. El planeta presenta un enfriamiento global acreditado por la sociedad científica. Dicho enfriamiento global está producido por la acción del hombre y su industria. Las catástrofes se sucederán en los próximos años debido a esa disminución de las temperaturas.
¿Cómo pensáis que se articularía el discurso ecologista entorno a este tema?

a. Aumentar masivamente la emisión de CO2 en el planeta para provocar un efecto invernadero que contrarreste la bajada de la temperatura.

b. No hacer nada puesto que la causa del enfriamiento es natural.

Desde mi punto de vista, creo que está claro que el 99% de los ecologistas diría que no se puede alterar el curso de la naturaleza y que lo correcto sería dejar que ésta se desarrolle sin intervención humana, porque "la madre naturaleza es sabia".

Con este supuesto quiero hacer ver cuál es el planteamiento primario que subyace en el pensamiento ecologista, y lo expondré en 3 puntos:

1. Lo que suceda en la naturaleza espontáneamente es bueno y verdadero.
2. Los desarrollos que el hombre produce (léase desarrollos tecnológicos) no son naturales y por lo tanto la forma de vida del hombre, y el propio hombre, no es natural.
3. Del punto 2. y 3. se deduce que los efectos que el hombre produce en la naturaleza no son naturales y por consiguiente no son buenos.

De todo lo planteado querría extraer algunas conclusiones. Si la Teoría del Calentamiento Global, no fuera cierta y dicho calentamiento no estuviera producido por la acción del hombre, si no que fueran fluctuaciones espontáneas de la temperatura del planeta, como ha venido sucediendo durante la larga historia de éste, entonces: ¿se intentaría remediar mediante medidas de intervención humana en la naturaleza? ¿Se le daría tanta importancia, hasta el punto de cambiar el sistema económico actual para evitar dicho calentamiento? O ¿se optaría por una política de "no agresión" con la idea de que si el planeta se calienta es porque debe calentarse ya que... "la naturaleza es sabia"?

Podríamos decir que la lucha del pensamiento ecologísta no es contra los desastres naturales, sino más bien contra la acción e intervención del hombre en la naturaleza, más allá de si esta intervención genera consecuencias positivas o negativas.

Todo esto resulta evidente cuando tratamos el tema de la conservación de las tribus indígenas cuyo medio de vida es anterior a la industrialización (época origen de todo mal según el pensamiento ecologista). Parece innegable que es mejor mantenerlas aisladas del mundo industrializado para que sigan siendo "naturales" aún a costa de que su esperanza de vida no supere los 25 años. Supongo que la respuesta inmediata es que viven felices, pero permítanme que al menos dude de la posibilidad de ofrecerles un futuro como el mío, en este contaminado mundo occidental de opresión y alienación donde tiramos la comida, tenemos acceso a una cultura y una libertad (aún) suficiente para movernos y pensar.