viernes, 7 de octubre de 2011

Steve Jobs 1955-2011


Hoy, si te fijas, podrás ver los bits alterados. Están alborotados. Los siento con prisa. Llevan datos de aquí para allá. Algunos, convertidos en luz, intentan ir aun más rápido con riesgo de saltarse las leyes. Pero no les importa porque saben que es un día especial. Quieren ser más diligentes que nunca. Demostrar lo que valen. Tienen que hacer llegar, los twitts de verdadera pena, los whatsapp de tristeza, los SMS llenos de lagrimas hechas comas ";,-(" Pero nadie sabrá los mensajes que ellos mismos se mandan. Pequeños guiños al intercambiar sus IPs. Algún "1" de más en sus cadenas de infinitos binarios. Porque saben lo que ha pasado. Porque esta noche todos pararon unos milisegundos en su trabajo frenético. Por un instante inapreciable, todo paró. No hubo trasiego de unos ni ceros. Solo espera. Para ellos una espera casi infinita. Una bienvenida para siempre en la nube a quien supo darles un alma.

JnM